El integrante de la familia Fiat 500 más grande retoma el espíritu del Fiat Multipla con grandes retoques que le adaptan a los nuevos tiempos.
Sus 4,14 metros de largo le permiten acoger a cinco ocupantes adultos con holgura. En su espacioso interior, encontramos una pantalla de 7” que proporciona una conectividad perfecta para tus viajes al servir como navegador, radio y ser compatible con Apple CarPlay e integración con Android Auto.
El crecimiento de Fiat 500 L ha provocado que el espacio para el equipaje también aumente. Tiene tres configuraciones en función de cómo se sitúe la base móvil: 343 litros o 400, ampliable hasta los 1.310 litros si se echan hacia delante los asientos de conductor y abatimos el resto.
Con respecto a los motores, esta gama se compone de dos motorizaciones gasolina y un diésel. El primero ofrece 95 CV, es el más básico y no cuenta con Start-Stop. El otro de gasolina es una evolución del 0.9 “TwinAir” y ofrece 105 CV. El de diésel ofrece 85 CV y se puede considerar como el más interesante, ya que es el más agradable de utilizar.
En relación a la tecnología y seguridad, este coche cuenta con un puerto USB para conectar tus dispositivos. Además, el retrovisor electrocrómico permite que el retrovisor se atenúe automáticamente cuando se detecta luz detrás del coche, reduciendo por tanto el resplandor. Otro aspecto a destacar es el freno urbano autónomo, que evita la colisión con vehículos precedentes, advirtiendo acústica y visualmente en primer lugar y frenando automáticamente en caso de no obtener respuesta. El sensor de lluvia y crepuscular encenderá los limpiaparabrisas y los faros respectivamente. Por último, encontramos el control crucero, con el que solo tienes que ajustar la velocidad antes de empezar el viaje para que mantenga esta durante todo el viaje.
La familia de Fiat 500 L ha aumentado: llegan las versiones Trekking y Wagon. Con respecto a este primero, tenemos que decir que su exterior destaca por su estética personal y deportiva inspirada en la imagen de los SUV. Además de su gran altura con respecto al suelo, ofrece paragolpes específicos con escudo de protección. Sus llantas de 17”, sus manillas satinadas y molduras laterales de acero cepillado hacen que su diseño exterior sea inconfundible. Sin embargo, este coche no tiene un sistema de tracción integral.
En la otra versión, es decir, el Fiat 500 L Wagon, el diseño exterior no está tan acabada, pero sus siete plazas hacen que Fiat lo califique como el monovolumen más pequeño del mercado.
