Cómo quitarle el polvo sahariano a tu coche

El polvo sahariano que ha invadido los cielos de la península ha caído sobre nuestros vehículos. Es por ello que te ofrecemos una serie de consejos y recomendaciones para lavar tu vehículo sin dañar la carrocería.

Los métodos de lavado para quitar el polvo sahariano:

Lavado a mano.

La primera y más importante recomendación es no demorarse mucho en lavar el coche. La principal razón es lo dañino que puede ser para la carrocería si este polvo se solidifica.

A la hora de lavarlo, debemos humedecer el polvo con agua tibia y usar esponjas suaves.

Sin duda alguna el lavado a mano es la mejor manera de lavar tu coche ya que es la manera más respetuosa con la pintura de nuestro vehículo.

Lavado por el túnel.

Si no tenemos la opción de lavar a mano o simplemente prefieres lavarlo por el túnel el primer consejo es quitar la mayor parte de suciedad, al menos la primera capa; con la pistola a presión.

En esta ocasión, el orden es un factor muy importante a tener en cuenta. Comienza con los pasos de ruedas, continua con los neumáticos y llantas y, finalmente, culmina con la carrocería y la cristalería del coche.

Espuma activa.

Una opción muy buena es usar una espuma activa a la hora de realizar el prelavado. Esta espuma debe utilizarse con el vehículo totalmente seco. Su funcionamiento es sencillo, pero con un resultado bastante bueno, con el nos ahorramos las posibles rayadas de la carrocería.

Para finalizar el lavado con espuma debemos terminar con la pistola a presión.

Herramientas recomendadas.

Cada zona del vehículo requiere de unos utensilios diferentes. Concretamente se necesita un cepillo para las llantas y unas bayetas de microfibra para la carrocería.

Cuando limpiemos la carrocería con nuestra bayeta aconsejamos pasarla de arriba hacia abajo y los cristales con movimientos circulares. En el caso de los cristales, no debemos usar los parabrisas como utensilio de limpieza ya que solo conseguiríamos deteriorar con gravedad tanto las escobillas como las lunas.

Para finalizar el lavado y que tu coche quede perfecto puedes acabar el proceso con cera para proteger la carrocería. Sea cual sea el método que uses es importante seguir los diferentes consejos para conseguir un acabado perfecto minimizando los riesgos de dañar la carrocería. No obstante, siempre recomendado acudir al lavado manual en la medida en la que se pueda.